Conjunto de quince breves diálogos escritos por el griego Luciano de Samósata (125-180 d.C). En los diálogos de cortesanas o hetairas intervienen una serie de mujeres dadas al "oficio más antiguo del mundo" que discuten con sus amantes y sus parientes sobre toda serie de relaciones: amorosas, humanas, políticas, comerciales, etc.
El estilo de Luciano se apoya en la Filosofía Cínica (los cínicos consideran que la forma de vivir es parte fundamental de la filosofía e inseparable de su manera de pensar) y se presenta lleno de escepticismo ante la marcha de un mundo de cuyas creencias y convenciones se ríe descaradamente.
Sus diálogos son una brillante sátira, pletórica de un acre humor que presta vida a las maliciosas escenas que siguen, a lo largo del tiempo, tan frescas y lozanas como cuando nacieron.
Célebre aventurero siciliano cuyo verdadero nombre era Giuseppe Bálsamo. Impostor genial, asombró a las multitudes de su tiempo con toda una serie de curaciones extraordinarias, con la piedra filosofal, con el elixir de la eterna juventud, con su opulencia y su liberal espíritu. Sobre su propia vida se tejieron numerosas leyendas dictadas casi siempre por la fantasía.
Cagliostro simboliza uno de los más representativos y siniestros instrumentos de la perversión humana, comparable, en algunos aspectos con Casanova y al marqués de Sade. No es un vulgar estafador con trucos de malabarista, se trata de un diabólico personaje de una audacia inconmensurable, que desafía cielos y tierras con un cinismo que difícilmente se encuentra en los mayores pícaros novelescos.
En 1949 Orson Welles codirigió e interpretó una película sobre este siniestro mago.
Juan de Buridán fue un modesto filósofo francés del siglo XIV, preocupado por el problema de la libertad del alma, tema sobre el que sostenía diferentes teorías. Así murió, sin resolver nada. Sus discípulos siguieron con las mismas dudas angustiosas que simbolizaron en la fábula llamada El asno de Buridán: el asno que murió de hambre y de sed, porque, teniendo comida y agua, no sabía por cuál de las dos decidirse.
Escritor inglés nacido en 1860. De vida inquieta, el autodenominado Barón Corvo, tras convertirse al catolicismo, trató en vano de alcanzar el sacerdocio, cosa que no consiguió siendo expulsado del seminario dada su gran afición a pecar contra el sexto mandamiento.
Son obras suyas Deseo y búsqueda del Absoluto, en la que critica a las mujeres por su sometimiento a la moral victoriana o Las historias que me contó Toto, relato de sus relaciones sexuales con un joven campesino.
En 1908 se trasladó a Venecia, donde vivía habitualmente en una góndola y dio ocasión a nuevos escándalos y fue acusado de homosexual, motivo por el que fue expulsado del Club de Gondoleros de Venecia.
Escritor y libertino francés nacido en 1734, de origen campesino, vivió de modo miserable en su juventud y tan sólo pudo superar el hambre al darse a conocer como escritor tras encontrar a poderosos protectores.
Autor de una extensa y desigual obra de tintes melodramáticos, sin embargo, se le admite una gran sinceridad en la narración de su propia vida. En su obra Monsieur Nicolás, ya afloran sus dos tendencias más manifiestas: el regusto incestuoso que le proporcionaba el yacer con cualquier desconocida e imaginarse que se trataba de alguna de las múltiples hijas naturales que había engendrado y el meticuloso interés por los pies y zapatos femeninos, sobre los que escribió una de sus obras más castas: El pie de Fanchette o el zapato color rosa.
Otros títulos suyos fueron Antijustina o las delicias del amor, Cartas de una hija a su padre o La campesina pervertida.
Restif de la Bretonne es un cronista de una época de manifiesto interés erótico, fue uno de los observadores más lúcidos y uno de los más apasionados actores de su propia historia.
